Alegría, agradecimiento y responsabilidad
Alegría por la concreción.
Agradecimiento al Ministerio, al Programa Educación y Memoria, a la Embajada de Suecia por haber acogido nuestra intención de participar.
Responsabilidad porque sumamos a la concreción el compromiso de trabajo para la transmisión.
Para el ICUF, voz y acción de la colectividad judía, progresista, idishista, internacionalista, miembro activo del Capítulo Nacional de la IHRA, era un deber ético y político participar. Era una oportunidad de reponer y difundir experiencias fundacionales y vigentes del movimiento como –solo cito las incluidas en este libro– la militancia feminista desde los primeros 50 reflejada en la revista Di idishe Froi o la antigüedad contemporánea con la ola migratoria del Teatro IFT, pionero en la actividad independiente desde 1937. En ambos casos iniciadas en ídish y respondiendo a la tensión entre preservar e innovar, continuadas en castellano, información a la que las y los alumnos del Instituto Sarmiento pudieron acceder recorriendo las estanterías del CeDoB.
Y también la convicción de que era necesario sumar más experiencias, lugares y tiempos. Para ello había que ampliar, aunar más miradas testimoniales o ficcionales. Hacer un pasaje al protagonismo valorando el potencial generador y creativo de niñas, niños y adolescentes.
Ese protagonismo quedó condensado en un libro que es un archivo, una cartografía con muchos itinerarios. Inacabado como todos los archivos con funciones de custodia y producción de saberes.
Archivo vivo, al que habrá que interpelar por más articulaciones entre territorios, ideas, personas, tiempos.
El archivo le pone nombre a las cosas, las organiza y le da sentido a lo que guarda.
Este libro-archivo, archivo-libro reconoce identidades y costumbres, personalidades, tradiciones familiares, recuerdos dolorosos de la experiencia del Holocausto, rescata tradiciones cooperativistas, sitios emblemáticos, se cuestiona sobre prejuicios, alude a la solidaridad, trae señales culturales, relatos de viajes no siempre elegidos, todas huellas en Argentina de una migración que supo no olvidar sus orígenes y hacer un ejercicio complejo de tomar la cultura del país de acogida.
Dijimos en el epílogo: “Las huellas de experiencias de migración son construcciones solidarias (…) muestran, enseñan. Hacen ejercicios de memoria al tiempo que ponen a cada marca en el lugar del no olvido, de la recuperación y la reparación”.
Las marcas son construcciones solidarias de memorias y recreaciones narrativas traman enunciaciones sobre el pasado con relaciones actuales. Eso es transmisión.
El contenido de la transmisión esta vez fue amasado por pibas y pibes con sus docentes de diferentes puntos del país, de escuela primarias y secundarias, públicas y privadas que seguramente se verán sorprendidas y sorprendidos al ver sus textos escritos en ídish. Se me ocurre pensar que para algunas y algunos de ellos hasta pueda ser un descubrimiento la existencia de esta lengua. Gracias al IWO por esta experiencia de pasaje, que es mucho más que una traducción.
Esta producción pensada como múltiples pasajes –la lengua es una– tiene tras de sí otros pasajes indispensables para asegurar junto a la memoria el compromiso contra el olvido, la negación, la distorsión.
• Articula lo íntimo y lo público
• Domicilia acontecimientos y protagonistas
• Matiza entre la épica, la nostalgia, los logros y las desesperanzas
• Legaliza y democratiza lo no escuchado, lo poco conocido
• Recoge, resguarda, respalda, contextualiza, ubica en series
Vuelvo al epílogo: “Que las jóvenes generaciones tomen las huellas y las reconozcan, las interroguen, las reescriban, redibujen, vuelvan a una vieja fotografía, visiten un lugar emblemático, descubran una canción en idish, es una garantía de perdurabilidad de un legado”.
Hacer memoria y circularla es militar para la paz, para la convivencia, para la riqueza cultural.
Hacer memoria en la escuela es educar para la paz, es una garantía para el futuro.
Por eso la trascendencia de este encuentro entre jóvenes productores de saberes con la historia y las muchas formas de recrearla es fecundo.
Por eso podemos confiar en un mañana inclusivo y respetuoso de la memoria y de la vida.
En idish:
Derfar kenen mir troymen in an ayngeshlosn un guerejtiker morgn fun ondenk un lebn
Zol azoy zayn!
דערפֿאַר קענען מיר טרױמען אין אַן אײַנגעשלאָשן און גערעכטיקער מאָרגן פֿון אָנדענק און לעבן
זאָל אַזױ זײַן
¡Que así sea!
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