Guedale Tenenbaum (Skidl, Polonia, 1914 – Buenos Aires, Argentina, 1980). Era pintor, artista, trabajador, pensador, crítico, militante de causas populares.
A comienzos de la década del 30 se trasladó a Argentina, dado el clima hostil que se vivía en su país natal. En Buenos Aires, no tardó en involucrarse con las causas populares. Trabajaba como tejedor —luego confeccionó camperas— y participaba en las luchas de su sindicato.
A la noche, tarde, después de trabajar y de cenar, llegaba el tiempo del arte, de pintar y de pintar reescribiendo. La cultura ídishe, el humanismo, la lucha contra el nazismo y el fascismo, el arte popular al servicio de las causas justas: esas eran sus banderas.
Antes de que el teatro IFT tuviera ese nombre —compañía IDRAMST— y de que tuviera su edificio propio, empezó a colaborar realizando las escenografías de las obras de teatro.
Entonces el teatro en ídish, los escritores, la literatura, los pensadores y los compañeros como Pinie Katz y Wolf Raizman se convirtieron en sus musas.
Sus micrografías, siempre dedicadas a personalidades que admiraba y confeccionadas con las letras de significativos textos (escritos por aquellas mismas figuras), expresaban los valores culturales más preciados para el judeo-progresismo. Estas recitan la prosa con colores, hablan al mismo tiempo de obra y autor, de discurso y de rostros, de expresión.
En el primero de esos cuadros plasmó el rostro de Pinie Katz (realizado a partir de fragmentos del discurso que Katz brindara en la inauguración del Primer Congreso del ICUF, el 11 de abril de 1941). Después vendrían Zhitlovsky, Peretz, Sholem Aleijem, Leivick, Raizman, y hasta Sarmiento.
Estos trabajos fueron exhibidos en instituciones. Tenenbaum nunca quiso vender sus obras, ya que para él el arte era público. No podía ser una inversión, un negocio o un disfrute privado, era para todos. Por eso los donaba a las instituciones del ICUF primero, a museos, a escuelas. Su ética expresaba su coherencia anticapitalista.
Fue parte de la delegación que viajó a ver el terreno de lo que después sería Zumerland para comprarlo. En el Peretz de Villa Lynch fue secretario de cultura y allí desplegó su arte, su trabajo, su ímpetu.
Guedale se fue muy temprano, joven, apurado, habiendo dejado un hermoso legado: la coherencia por los principios, el cuidado por la cultura popular, por el idioma dulce, desde el arte, desde un arte muy suyo y peculiar. Dejó una obra increíble, inmensa, y única, como él.
En la actualidad, ochenta años después, el CeDoB Pinie Katz tiene una gran responsabilidad: honrar a este pionero del arte y la cultura judeo-progresista y cuidar su legado.
Contamos con las micrografías:
—I. L. Peretz (rescatada del I. L. Peretz de Villa Lynch en 2005 por Nerina Visacovsky y otrxs). 1949 – Original.
—Wolf Raizman (donada por lxs hermanxs Kantor, sus herederos). 1952 – Original.
—de Pinie Katz (cortesía de su nieta, Anat Eitan, quien nos facilitó la imagen, copia fiel del cuadro original que aún se exhibe en su casa, en Israel). 1941 – Copia fiel.
Pintura original:
—Chaim Zhitlovsky. 1943 – Original.
Si querés conocer más de este artísta, te ofrecemos algunas notas alusivas en nuestro Boletín CeDoB Pinie Katz
Guedale Tenenbaum: el pintor de las letras en ídish, por su nieta, Anahí Guelman
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